BUFFETT SOBRE LA BURBUJA Y LA CENICIENTA

Warren Buffett, a quien ya he citado alguna vez, respondió así a algunas preguntas sobre el asunto:

“Lo que vemos en nuestro negocio de broker residencial es una deceleración por doquier, dramáticamente superior en los mercados anteriormente calientes. (...) Los inversores intra-día de Internet se han ido a negociar con pisos, y ese tipo de especulación puede producir un mercado que se mueve mucho. (...) Hemos tenido una burbuja real, en cierto grado. Me sorprendería si no hubiera algunos ajustes significativos a la baja, especialmente en el segmento alto del mercado inmobiliario”

“El préstamo alegre siempre tiene consecuencias. Es como una enfermedad que no se manifiesta en las primeras semanas, como una epidemia que no se muestra hasta que es demasiado tarde para pararla. Si se mira a los balances que están siendo presentados por los bancos ((a la comisión del mercado de valores)) y se comparan con los del año pasado, y se miran los balances de “interés acumulado pero no pagado”, se observarán algunas estadísticas muy interesantes [implicando que muchos propietarios no son ya capaces de cumplir con sus obligaciones financieras]

Y sigue:

“Al principio, (el precio) se mueve por fundamentales, luego la especulación coge el relevo. Como dice el viejo dicho, lo que el hombre sabio hace al principio, lo hacen los tontos al final. Con cualquier tipo de bien que tiene un gran movimiento, primero los fundamentales atraen a la especulación, y luego la especulación se hace dominante. Una vez que ya hay un recorrido de precios, y la gente oye que su vecino ha hecho mucho dinero con algo, ese impulso domina, y estamos viendo eso en las materias primas y la vivienda... Las orgías tienden a ser mas salvajes en sus momentos finales. Es como la Cenicienta en el baile. Sabes que a la medianoche todo volverá a ser ratones y calabazas. Pero miras alrededor y dices “venga, un baile más”, y todo el mundo hace lo mismo. La fiesta se pone más divertida, y además no hay relojes en la pared. Pero de repente el reloj toca las 12, y todo vuelve a ser ratones y calabazas.”

Si alguien quiere tener más pistas, puede invitar a Buffett a cenar. Yo es que no llevo suelto.